sábado, mayo 29, 2010

La Verdadera Verdá (opinión)

Palafox y Mendoza y
4 norte. Kino
Políticas culturales…

o los consumos
acertados

Joaquín Ríos Martínez*


La planeación de los eventos es la diferencia entre su éxito o el fracaso. La correcta difusión y promoción de las agendas culturales públicas y privadas asegura, cuando menos de inicio, un número importante de asistentes y la realización de la primera intención: el consumo del arte como objeto terminal: fotografía, pintura, literatura, teatro, danza, grabado, etcétera



De un tiempo a la fecha, el gobierno del Distrito Federal ha venido realizando una serie de acciones a favor del arte y el desarrollo de la cultura, factibles de imitar en otros estados de la república, recorridos guiados a diferentes espacios de la ciudad.



La segunda semana de mayo se organizó un tour en colaboración con galerías, museos, librerías, artesanos y creadores, quienes tuvieron la oportunidad de ofertar sus materiales en una especie de mega tianguis del arte, con la facilidad, otorgada por el gobierno del DF, de recorres decenas de espacios en los vagones turísticos de forma gratuita.



Las excursiones se programaron a horas específicas con salidas de diversos puntos de la ciudad, los asistentes podían bajar en cada punto de interés a conocer, disfrutar y apreciar espectáculos callejeros como: danza, teatro o música; entrar a las galerías de arte, recorrer librerías con promociones especiales, museos y casas de artesanías. Pero sobre todo a reencontrar una ciudad viva, intensa y cultural, al margen de la convulsión violenta que acosa el diario devenir.



Las expectativas fueron ampliamente rebasadas, varios miles de espectadores salieron a las calles a recuperar los espacios públicos otrora centros de diversión comunitaria, plazas tomadas por los artistas del cotidiano que urgen sitios para mostrar la venganza de la creación ante el yugo de la perfidia.



“Las sociedades se reconocen a sí mismas a través de los valores en que encuentran fuente de inspiración creadora… la preservación y el aprecio del patrimonio cultural permite entonces a las sociedades defender su soberanía e independencia y, por consiguiente afirmar y promover su identidad cultural” (Conferencia Mundial acerca de las Políticas Culturales, París, 1982. UNESCO).



En una actitud falaz y retrógrada muchos municipios de la república mexicana condenan las actividades artísticas en las plazas públicas, las etiquetan como trabajo ambulante y por ello las castiga con multas y el decomiso de las herramientas de trabajo. ¿Qué diferencia una actitud de gobierno de la otra? ¿Cuántos grados más de sensibilidad, educación y disposición política se requieren para la aplicación de políticas culturales que respondan a las demandas de consumo?



La Verdadera Verdá propone a los candidatos a gobierno y presidencias municipales especialmente de Puebla, próximos a votarse el 4 de julio (quienes por cierto rehuyen los debates y no han ofrecido declaraciones acerca de los temas del arte y la cultura o de la educación y su calidad), que incluyan en sus discursos y acciones de gobierno actividades que beneficien a la mayor cantidad de habitantes mediante el arte y el desarrollo de nuestras culturas.



La cultura –dice R. Zallo, en El mercado de la cultura…, 1992- ya no es fundamentalmente el espontáneo encuentro entre el talento de los creadores, el diagnóstico de los críticos y la demanda social. La cultura de nuestro tiempo, para serlo o parecerlo, es ante todo una oferta que acude a los mercados a través de unos complejos mecanismos de decisión y mediación. Por lo tanto, se asume que existe un mercado enfocado a la cultura cuando existe quien lo consume.



“Entonces, el consumo cultural puede ser considerado como “la apropiación por parte de las audiencias de los productos y equipamientos culturales, las relaciones que establecen con ellos, las resignificaciones y las nuevas asignaciones de sentido a los que los someten, y los motivos de su selección”.



En Puebla, dicho sea de paso, no se tiene claro aún el concepto de industria cultural y poco se hace en materia de turismo cultural, la infraestructura de museos, galerías, talleres de arte, teatros o librerías, está en espera de ser explotada. Contamos con los turibuses y con guías que podrían capacitarse en otros temas del arte. Desgraciadamente, el asunto se torna de Voluntad política y no de conciencia ciudadana.



No es descabellado entonces pedirle, exigirle a los candidatos y futuros gobernantes, que se integren verdaderos discursos basados en la creación de políticas culturales y de educación, específicas para el estado de Puebla que incentiven el desarrollo de las industrias culturales de producción, difusión, promoción o distribución.


Hagamos valer nuestros derechos y obligaciones saliendo a emitir un voto razonado el próximo 4 de julio. Forcemos el cumplimiento de los acuerdos de transparencia, acceso a la información y libertad de expresión, a través de nuestro compromiso con el arte y la educación.

*Periodista cultural. Diplomado en Administración de las artes. Diplomado en Desarrollo y Gestión cultural. Este y los textos anteriores en: achtli05.blogspot.com; Pueblahoy.net; criticarte.com; razonesdeser.com; revista Culturista; Fanzine 3D2.

miércoles, mayo 26, 2010

Sala de lectura Metzcalli


El segundo libro de la serie Autoría de Jaime Moreno Villareal, dentro de la colección del Taller Ditoria y Conaculta, es Orfeo Mosaico, un libro que no existía pero que debía existir. Aristóteles lo menciona, Orfeo era su autor, su título era Red.

Dicho libro exponía el desarrollo de los animales como el entramado de una red. Un comentarista sugiere que en ese libro se comparaba la red con la organización del mundo.
Orfeo Mosaico para nombrar la reflexión o su espejo, o también la reverberación sonora de la mente que se indaga a si misma. En el horizonte mental y microcósmico de la compleja integración de un mosaico de menudísimos trozos, parecía destellar un tejido sináptico. El pensamiento que se pensaba a si mismo era escritura.

Orfeo Mosaico (Taller Ditoria y Conaculta, 2008). De venta en Educal de la 4 norte 203. Para los lectores de Achtli, descuentos por medio del Monedero electrónico.

jueves, mayo 20, 2010

Teatro


miércoles, mayo 19, 2010

Conferencias acerca de la música contemporánea


viernes, mayo 07, 2010

Camino hacia las flores (opinión)


Camino hacia las flores
Luis Manuel Cabrera*

Mayo, por cuestiones inicialmente relacionadas con la naturaleza, ha sido considerado como el mes de las flores y con este afán fue como en este puente decidí dar un paseo por una de las joyas arquitectónicas de la zona; aquella cuyo nombre significa “Linaje de las flores”: el legendario Xochitécatl.

Este importante centro ceremonial con pirámides en espiral, museo de sitio y gran cantidad de piezas arqueológicas invaluables pertenece al municipio de Nativitas en el estado de Tlaxcala y con este conocimiento, fue que emprendí el viaje. Sin embargo, llegar hasta ahi no fue tan sencillo por la falta deseñalética a este destino turístico. El camino está plagado de propaganda política, pero las señales que conducen hasta Xochitécatl, son prácticamente inexistentes. Después de preguntar aquí y allá a los lugareños, logré llegar a mi destino, no obstante, una nueva decepción me esperaba.

El lugar sigue resultando imponente como vestigio arquitectónico y arqueológico de las ceremonias celebradas aquí y en el muy cercano Cacaxtla, pero una vez más, la señalética era el detrimento a la visita. El sol, el polvo y principalmente el olvido, han hecho que las cédulas que nos explican las pirámides y la historia del lugar sean prácticamente ilegibles en su mejor caso o bien que estén destrozadas, en el peor. No pude, al ver el estado lamentable de la literatura informativa, dejar de pensar en la brillantez de los pendones y carteles donde los candidatos políticos pugnaban a lo largo de la carretera por cargos de elección popular.

Me pregunté entonces si en alguna de las propuestas de campaña se incluiría la señalética y adecuada rotulación en camino y en el sitio de Xochitécatl. Nuestro patrimonio turístico es asombro de propios y extraños y resulta triste el hecho de que no se le dé el valor que como sustento nacional conlleva. Mi esperanza es que si usted algún día decide visitar estas imponentes ruinas, encuentre fácil acceso a ellas y mejor: rica información detallada sobre el tesoro prehispánico que está presenciando.

*Productor y director de teatro

Culturista de mayo


Revista de difusión cultural. Teatro, fotografía, poesía, crítica, derechos humanos, exposiciones, talleres, turismo y la agenda cultural del mes.
De venta en Puebla en la Casa del Escritor (5 oriente 201), librería del Ayuntamiento (Portal Hidalgo 10), y en puestos de periódicos del centro histórico.
30 pesos.

martes, mayo 04, 2010

El huésped vacío