Kino: 32 años de fotografía

"Si un fotógrafo dice que no es un voyeur, entonces es un idiota".

Helmut Newton

Joaquín  Ríos  Martínez, mejor conocido como KINO, es un voyeur consumado que realiza su trabajo con evidente pasión narrativa y en el contexto de sus fotografiados, mediante la creación de escenas oníricas, las cuales conservan singular frescura y energía.

La llegada de Kino en la escena fotográfica coincide con su interés en disciplinas artísticas como la arquitectura, la danza, el teatro y, evidentemente, las artes visuales.

Mirando éste conjunto de fotografías que nos comparte, resulta evidente su planteamiento figurativo e irreverente, manifiesto en el impacto de sus fotografías. En sus imágenes es posible descubrir como el cuerpo femenino se integra al imaginario del espectador, sin ser objetos fácilmente disponibles al deseo masculino que se encuentra inmerso en nuestra cultura visual.

Podemos descubrir que en sus sesiones fotográficas, Joaquín no nos presenta un mundo elegante, sin preocupaciones de cortejo, riqueza y belleza, sino más bien un mundo privado, o bien la puesta en escena donde la modelo interactúa con su entorno, en algunos casos fotografías que buscan liberarse de las restricciones tradicionalistas.

Mientras que sus fotografías son llamativas y entretenidas, como una ironía que se comparte entre buenos amigos, es posible detectar en ellas la forma en que las realiza: imágenes en blanco y negro con altos contrastes entre los valores más claros y los tonos más oscuros, e imágenes en color, de apariencia casi minimalista.

Hoy en día, Kino no muestra signos de desaceleración en su trabajo al sintetizar en su propuesta visual, la mirada del voyeur que rinde un homenaje a la corporeidad del sujeto femenino.

Juan Carlos Valdez

Fotógrafo

Director general del Sistema Nacional de Fototecas (SINAFO)

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*Kino cumple treinta y dos años (Setenta y cinco exposiciones, treinta y siete modelos) ininterrumpidos de organizar exposiciones, talleres y pláticas acerca de la fotografía de desnudo en varios estados de la república. Su trabajo se basa en el respeto al cuerpo femenino y masculino con un llamado a la libertad y a la no violencia física y mental. Atemos nuestros corazones en torno a la experiencia estética y el diálogo corporal.