lunes, febrero 25, 2013

Derechos de autor & plagios

Plagios y 
derechos
de autor

Joaquín Ríos
Martínez*


Los escritores y los creadores en general debemos proteger nuestras obras porque en la actualidad es más fácil ser víctima de plagios, por la difusión que se hace de ellas en las diferentes redes sociales; si bien los conceptos no tienen dueño las ideas y las obras si lo tienen, señaló en entrevista Beatriz Meyer Hernández, coordinadora de la Escuela de la Sociedad General de Escritores de México (Sogem) en Puebla.

El autor intelectual nunca pierde sus derechos y, ahora incluso, son heredados a sus familiares directos sin necesidad de que medie un testamento. Sin embargo lo mejor para poder garantizar la tutoría es que se registren ante el Instituto de Derechos de Autor, y así evitar plagios, robos y malos entendidos, añadió.

El Derecho de autor está extendido a los cien años y los herederos pueden reclamar las regalías de obras que se estén comercializando sin autorización, como pasa con la dramaturgia en las adaptaciones, o con las telenovelas en la televisión que ni siquiera dan el crédito de en qué obra están inspiradas. En el caso de la literatura, aunque no estuviera registrada, con el hecho de que sea publicada te ampara como autor, continuó la autora del libro de cuentos Para sortear la noche (1995).

En al caso de la literatura, como de otras artes que concluyen con una obra física, existen peritos especializados que pueden detectar la autoría, porque uno tiene una forma de escribir que te delata como individuo, el estilo. En caso de ser sometido a una investigación se remiten a lo más notorio que es: cómo se usan las comas, las maneras de expresarte en la sintaxis, tu fraseo y forma de “respirar” al escribir, explicó la maestra de varias generaciones de escritores.

Puede suceder –ejemplificó la coordinadora de la Sogem Puebla- que entregas de buena fe tus textos a un editor para ser dictaminados y, en su caso publicados y que él se los adjudique o se los entregue a otra persona, y que después con pequeños cambios de estructura sean publicados. Ésto es tan común con los fraudes o los delitos bancarios.

En el caso de los talleres literarios en Puebla, los cuales cada día son más y en lo general de buena calidad, se debe enseñar a los jóvenes a respetar el trabajo intelectual, a no por querer impresionar al titular o la novia se quieran robar unos versos y los editen como suyos -eso es una marranada, acusó la autora de Este lado del silencio (2001)- que sólo perjudica a quien lo hace, y si los cachan difícilmente volverán a tener credibilidad.

Por ello la recomendación es registrar la obra, en Puebla existe una oficina dependiente de la Secretaría de Educación Pública, es económico y la forma más segura de proteger el patrimonio intelectual, porque esto es motivo de demandas por daños y perjuicio, y multas económicas, aseguró la escritora Beatriz Meyer, antologada en múltiples colecciones, quien finalizó invitando a inscribirse al Diplomado de creación literaria que oferta la Sogem en las instalaciones de la calle 3 norte 3.

*Para el diario Síntesis de Puebla.