foto: Kino

El arte murió
viva la idea...

Joaquín Ríos Martínez*



¿Qué es el arte contemporáneo? Es el nombre del diplomado que dio inicio en el Museo Amparo el pasado fin de semana, con la intención de esclarecer este difícil tema al que rodean varias definiciones, posturas y tendencias que lo recorren desde el principio del siglo XX.


El primer paso es poder definir lo que es el arte contemporáneo, aunque a los artistas no es lo que les importe, es más bien a los teóricos que quieren etiquetarlo todo –mencionó Gonzalo Ortega, especialista en Artes plásticas y visuales por la UNAM-. El artista siempre se ha manifestado en contra de lo que considera está mal y que sucede a su alrededor, en su tiempo.


Y es claro que la realidad que vivimos hoy en día –continuó- es muy compleja y está rompiendo todos los paradigmas que se vivieron años atrás, hay caos e incertidumbre y eso se manifiesta. El arte como lo conocíamos, un objeto, ha muerto para dar paso a otra manifestación: la idea. El concepto detrás de la producción.


Cuando uno se enfrenta a conceptos como Arte contemporáneo y Actual es como enfrentarse a la belleza o la libertad, son ideas demasiado grandes que al querer abarcarlas se pierden en las definiciones. Hoy hay nuevas ideas y formas de reinsertarse en su contexto social con proyectos de museo, espacios emergentes, públicos, en internet. El arte contemporáneo siempre ha abordado un contexto muy específico y ha sido muy crítico.


Hay que recordar –responde el maestro en Arte en Contexto por la Universidad de Berlín- que la estética tiene varias vertientes y una de ellas es la estética de lo grotesco, entonces cuando uno entra a una exposición de contemporáneo que no se “entiende o resulta choqueante” también se está acudiendo a la experiencia estética.


El arte es comunicación y expresión –concedió Gonzalo Ortega- con sus símbolos y problemáticas del momento, quien cree que entender el Barroco en su tiempo era sencillo está equivocado, cada momento histórico que creado su propio estilo artístico generalmente de ruptura con lo inmediato anterior, y venía un nuevo esfuerzo mental por parte del observador, y a la distancia es más fácil de comprender.


A la pregunta de porqué parece que el arte se va quedando lejos de las generaciones anteriores por ocurrente y panfletario, el ex director del Museo de Artes y Ciencias de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), dice: “porque en efecto se está convirtiendo en una idea más que un objeto, que se presta mucho al fraude y el engaño”.


Para poder estar al tanto de lo que sucede en el arte actual o contemporáneo y descubrir el oportunismo del creador hay que estar muy bien informado y estar permanentemente con un canal abierto a la realidad. Quién no está informado lo juzgará de superficial, no es verdad que se pueda entender el arte de primera instancia, se requiere de cierta información y disposición frente a él.


En este sentido –agrega el curador de múltiples exposiciones de arte- la difusión cultural tiene mucho que ver acercando información, desde las cédulas dentro de los museos, los medios de comunicación y las escuelas.


Cuando los artistas responden que el arte no debe comunicar sino sólo expresar es porque adquieren una postura defensiva ante su trabajo –finaliza el entrevistado- si nadie entiende sería un acto solipsista (que sólo uno lo entiende) absurdo porque es comunicación aunque el creador no espere respuesta.


El diplomado contempla las temáticas: Las vanguardias artísticas del siglo XX; Entre tradición y modernidad; Obra de arte integral; Arte cinético; Posmodernismo; El lenguaje directo de la realidad; Arte público; Arte de medios y Arte sonoro, entre otras.

*Publicado el lunes 27 de febrero de 2012 en el Síntesis de Puebla.