domingo, julio 06, 2008

0707 Verdadera Verdá

foto: KINO. detalle de la Casa de los muñecos. Museo Universitario.
La Verdadera Verdá
Dale, dale, dale… o políticas culturales
Joaquín Ríos Martínez*

En los 20 años más recientes de la ciudad la Universidad Autónoma de Puebla es la institución (no privada) que ha mantenido una idea de política cultural de desarrollo social, integrando manifestaciones variadas con apego a los gustos y necesidades generales.
Cuando menos en este tiempo –salvo un periodo doguerista- las actividades artísticas y culturales se han mantenido siguiendo una línea formal de difusión y promoción, las cuales denotan una continuidad institucional y no un reacomodo de chapulines políticos. Aunque es innegable que las crisis económicas influyen en la calidad de los eventos.
Exposiciones, conciertos, presentaciones literarias, cursos, diplomados, congresos, talleres, su propia editorial, una estación de radio, una Facultad de Filosofía y Letras proactiva y una maestría en Estética son signos del interés de los rectores, de ahora y de antes -más allá de estos veinte años Malpica o Vélez Pliego hicieron lo suyo-, por contribuir al desarrollo del arte en Puebla.
La Uap cuenta con un Museo “Casa de los muñecos”, situado –según la Junta de Sevilla, España-, entre los 12 más importantes de Latinoamérica gracias a su acervo de arte novohispano; una galería de arte “Espacio Catorce”, para artistas emergentes, una Escuela de Artes que enseña teatro y danza y pequeñas jornadas de cine en diferentes unidades académicas.
En el mes de octubre la misma universidad contará con su propio Complejo Cultural y con ello se espera que la universidad destaque en ámbitos como la danza contemporánea y el teatro universitario, y retome un espacio para el cine de arte, el cual no se da desde aquellos ciclos en el Salón de proyecciones del Carolino en los años noventa.
Ninguna institución está exenta de escándalos, rumores o acusaciones, y la autónoma no es la excepción. Las polémicas en torno al nombramiento y ahora reelección de Flavio Guzmán, director de la Escuela de Artes; las acusaciones contra una maestra de teatro por beneficiarse materialmente cuando la remodelación de la escuela, o los supuestos negocios al amparo de la Feria Nacional del Libro lo ejemplifican.
Aún así no es la cantaleta de dale, dale, dale, no pierdas el tino con la que actúan la Secretaría y el ahora desmantelado Instituto Municipal de Arte y Cultura. Sus palos de ciego y los constantes cambios de chapulines imberbes no permiten la profesionalización, ni la gestión verdadera, ni el desarrollo del arte, ni la compenetración con la sociedad, ni una relación cordial con los artistas.
Si dejáramos de pagar impuestos y con ello exigiéramos que fueran autosustentables, ¿mejoraría el trabajo, habría cuadruplicación de puestos, intentarían engañarnos con eventos mediocres y que desconocen? ¿Por qué se pagan cuotas políticas y nunca se contratan gestores y promotores profesionales?
Este mes quedará la nueva Ley de transparencia y acceso a la información pública del Estado de Puebla, una prueba más para medirle el agua a los camotes. ¿Dónde están los diputados, con la corrupción o con sus votantes? Sus respuestas son la Verdadera Verdá.


*Comunicólogo diplomado en Administración de las Artes, y en Gestión Cultural. Comentarios a: cuestionarte@hotmail.com; http://artemetzcalli.blogspot.com Este y los textos anteriores más extensos en: http://achtli05.blogspot.com; www.criticarte.com