miércoles, febrero 02, 2011

Editorial Culturista

Ratificar en
alternancia



Por: Luis Manuel Cabrera*


Este mes tiene una particularidad en Puebla: el cambio de gobierno estatal y municipal y con ello, el cambio de partido político que había venido rigiendo a nuestras comunidades. Esto conlleva la suposición de que por fin veremos caras nuevas en nuestros empleados públicos y no las acostumbradas que en cada cambio gubernamental o municipal regresaban en los mismos puestos o en otros, pero siempre dentro del sistema.

No obstante, esto no es completamente seguro... En el supuesto (remoto, pero no faltan casos) de que algunos empleados públicos estén solicitando su ratificación durante estos cambios gubernamentales y municipales, siento que sería conveniente crear consensos entre la población sobre el desempeño de los solicitantes. Claro está que esto debe hacerse por áreas donde los beneficiados por los servicios prestados puedan expresarse democráticamente sobre la constitución de los cuerpos burocráticos (repito, sólo en el caso de las ratificaciones).


¿Quién más puede hablar del desempeño de los mismos que el pueblo que es a la vez patrón y gobernado? Sabemos que la mayoría de burócratas son impuestos y no elegidos y es por ello que en las ratificaciones deberían tomarse en cuenta las habilidades y capacidades demostradas ¿No ocurre el caso en cada campaña política de que se promete que serán sólo “los mejores hombres y mujeres” de cada comunidad quienes ocuparán los puestos públicos?


Esta es una manera muy válida de demostrar que las promesas de campaña fueron cumplidas. Insisto, esta es tan sólo una propuesta en el supuesto de que haya empleados públicos que quieran ser ratificados, con la convicción de que serían los menos. Pero es bien sabido que de todo hay en la viña del Señor, así que una vez más, es cuando se pide jamás perder la facultad de sorprenderse.


*Director y productor de teatro.