Editorial
¿Aún existen?
Por: Luis Manuel Cabrera*
Un término muy empleado en los departamentos burocráticos es el que se emplea para designar al encargado de llevar a cabo un contacto directo entre los mandatarios y los medios de información y es el de “comunicación social”. Este departamento, aunado al de “promoción y difusión”, es el encargado de que la población tenga acceso directo y claro a conocer lo que el organismo central está trabajando y de esa forma, atraer a los interesados a formar parte de sus actividades, en mayor parte como público invitado, hablando específicamente del caso de los museos y otras manifestaciones culturales.
Por: Luis Manuel Cabrera*
Un término muy empleado en los departamentos burocráticos es el que se emplea para designar al encargado de llevar a cabo un contacto directo entre los mandatarios y los medios de información y es el de “comunicación social”. Este departamento, aunado al de “promoción y difusión”, es el encargado de que la población tenga acceso directo y claro a conocer lo que el organismo central está trabajando y de esa forma, atraer a los interesados a formar parte de sus actividades, en mayor parte como público invitado, hablando específicamente del caso de los museos y otras manifestaciones culturales.
Sin embargo, de un tiempo a la fecha, algo está pasando con estos departamentos de nuestro estado y municipio porque ocurre que, simplemente, no se dan a conocer las actividades que los cuerpos burocráticos están trabajando. Una cosa es el hecho de que por existir campañas electorales, tengan que frenar la difusión de la labor burocrática para no caer en mal interpretaciones de carácter proselitista; y otra muy distinta, el de que no se conozca qué se está haciendo por ningún medio. Hay quien dice que es a causa de la recesión pero escuchamos lo que se hace en otros departamentos a toda hora, pero cuando es el caso de la cultura simplemente no hay conocimiento de sus actividades.
Es de la conciencia común el saber que este departamento es siempre el mayor castigado a la hora de la repartición de recursos, pero sentimos que al menos algo se debiera saber de su desempeño. Hasta hace pocos meses se tenía conocimiento pero últimamente hemos estado sometidos a la incógnita total de qué ocurre en museos, galerías y centros culturales bajo la jurisdicción de gobiernos municipal y estatal.
Sirva esta editorial como una invitación a que nos hagan saber si es que todavía existen, es decir, saber si el irles dejando en el olvido es la forma de atraer su extinción, porque eso es lo que pareciera...
*Productor y director de teatro
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