Clotaire Rapaillé

La condición del pensamiento

Joaquín Ríos Martínez

La ciudad de las ideas, evento que se realizó en Puebla del 6 al 8 de octubre tuvo, entre los 21 conferencistas, la participación de Clotaire Rapaille, un estudioso francés de las culturas en el mundo, y sus diferentes formas de organizarse (códigos) para asumir la vida cotidiana.
En su conferencia dictada el viernes por la tarde explicó que él no cree en lo que la gente dice acerca de las cosas, él cree que las personas actúan pero no tienen idea de porqué hacen lo que hacen y, por qué dan explicaciones a las cosas sin sentido.

Yo creo, dijo, que en este momento estamos en todas partes impresionados por quienes somos y por la cultura en la que nos desarrollamos y nos influencia, pero niega todo lo que hacemos en la vida. La forma en la que se ama, se vive y se produce está preorganizado por la cultura y por una primera impresión de lo que es la organización social.
Todos vivimos con una primera impresión de las diferentes culturas del mundo –continuó el sociólogo-, y el conocerla preorganiza nuestras vidas ya que cada cultura del mundo tiene sus propios códigos, y es hasta que comprendemos ese código que entendemos porque alguien hace algo y cómo lo hace.

Clotaire Rapaille ejemplificó diciendo que los franceses no quieren trabajar, para ellos todo es pensar y es allá en donde se encuentran los mejores pensadores del mundo, según él; los estadounidenses creen que pensar es un desperdicio de tiempo, para ellos todo es actuar aunque no sepan lo que van a hacer, como con la guerra de Irak.
El código de los británicos –aseguró el estudioso- es el desapego a las cosas materiales y a la vida. En los alemanes el código social es respetar las múltiples reglas que han establecido para sí mismos, su gran verbo es obedecer. En México, por ejemplo, -dijo- están acostumbrados a sufrir y así se desarrollan, a diario se enredan en el sufrimiento y creen que nacieron para ser agobiados por la vida.

Los mexicanos poco se quejan de las cosas malas y aceptan con resignación lo que les toca. Además –observó- se regodean con la muerte, la invocan una y otra vez. No van a lo que sigue, se quedan una y otra vez lamentándose.
El futuro para el mundo debe reorganizarse y crearse a partir de la unión de culturas del planeta, porque todas las culturas deben aportar lo mejor de ellas para poder redefinirnos y avanzar hacia una armonización de ideas y formas de vida.

En el libro Código cultural, el antropólogo cultural y experto en mercadeo, Clotaire Rapaille, revela por primera vez las técnicas que ha utilizado para mejorar las ganancias y prácticas de varias de las empresas de la lista de compañías Fortune 100 como Chrysler, General Electric, AT&T, Boeing, Honda, Kellog’s y L’Oréal.
Sus innovadores descubrimientos arrojan luz no sólo en el tema de los negocios sino sobre la manera en que todo ser humano alrededor del mundo vive y actúa. La noción decisiva de Rapaille es que adquirimos un sistema silencioso de códigos a medida que crecemos.

Estos códigos son los que nos hacen pertenecer a una cultura o a otra, e invisiblemente le dan forma a la manera como nos comportamos en nuestras vidas. Entenderlos nos permite hacer negocios e introducir productos a cualquier mercado de manera novedosa y efectiva.

Nota aparecida en el diario Síntesis de Puebla, el 10 de octubre de 2008.